La Organización Mundial de la Salud emitió en diciembre de 2015 una alerta epidemiológica contra el virus del Zika por su posible relación con la microcefalia en recién nacidos y otras enfermedades congénitas. La posible relación de este virus con la microcefalia se ha manifestado en Brasil, donde, según detalló la OMS, hasta el 30 de noviembre del 2015, se habían detectado en 14 estados del país 1,248 casos de microcefalia, que se están investigando. Según el informe, en ese país la incidencia de microcefalia en recién nacidos ha aumentado 20 veces desde el año 2010. Hace cinco años, se registraban 5 casos cada 100.000 nacidos. Ahora se registran casi 100.
Según dicho Ministerio, el mayor riesgo por contagio a embarazadas se produce en el primer trimestre de gestación. Las madres pueden no presentar casi ningún síntoma, pero eso no impide que la infección perjudique al bebé.
Aedes aegypty (Imagen de Wikimedia Commons) |
¿Qué es y cómo se transmite?
La enfermedad llamada fiebre del Zika o simplemente zika es producida por el virus del Zika, un arbovirus perteneciente al género flavivirus (aquellos que algunos invertebrados como la garrapata transmiten al ser humano) El zika se tranmite por la picadura de algunos mosquitos del género Aedes, como el Aedes Aegypti, que es el principal vector de dengue, fiebre amarilla, chikunguña y zika. Este mosquito es originario de África. Fue identificado por primera vez en los bosques de Zika (Uganda) en 1947, en monos, y su transmisión a humanos se confirmó en Uganda y Tanzania en 1952. Pero la alerta ha surgido a raíz de la aparición de diversos casos en países de América Latina, que son los que han servido para constatar que el virus se va extendiendo fuera de su área geográfica original.
¿Cuáles son los síntomas?
Tras un período de incubación de 3 a 12 días, aparecen los síntomas, generalmente moderados, que pueden ser: fiebre de menos de 39°C, dolor de cabeza, debilidad, dolor muscular y en las articulaciones, inflamación que suele concentrarse en manos y pies, conjuntivitis no purulenta, edema en los miembros inferiores y erupción en la piel, que suele comenzar en el rostro y luego se extiende por todo el cuerpo. Con menos frecuencia se presentan vómitos, diarrea, dolor abdominal y falta de apetito. También hay personas que presentan la infección, pero de forma asintomática. En general la tasa de hospitalización es baja y la mayoría de las personas se recupera sin mayores complicaciones.
¿Cuál es el tratamiento?
No hay vacuna ni tratamiento específico para el zika. El tratamiento sintomático suele incluir paracetamol o acetaminofén para el control de la fiebre (evitando la aspirina), antihistamínicos para el prurito causado por la erupción e ingerir abundante líquido.
¿Quienes tienen más riesgo?
El mayor riesgo es para las mujeres embarazadas, sobre todo durante el primer trimestre de embarazo, por la correlación entre la infección por el Zika y los casos de microcefalia detectados en fetos y bebés. Por ello, los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos han emitido una alerta de viaje de nivel 2 sobre 3 para 14 países latinoamericanos donde hay contagios de virus del Zika, en la que recomienda a las mujeres embarazas o que planeen estarlo que eviten viajar a Brasil, Colombia, El Salvador, la Guayana Francesa, Martinica, Guatemala, Haití, Honduras, México, Panamá, Paraguay, Surinam, Venezuela y Puerto Rico.
Distribución geográfica del virus del Zika |
Además, aunque la mayoría de las personas desarrollan formas leves de la enfermedad, en algunos casos pueden desarrollarse formas más graves, especialmente entre personas de la tercera edad, bebés y enfermos crónicos (diabetes, problemas pulmonares, obesidad...). Estas formas más graves cursan con manifestaciones neurológicas como encefalitis o síndrome de Guillain Barré (trastorno autoinmunitario caracterizado por debilidad muscular y arreflexia).
¿Se puede viajar a los países afectados?
A fecha de hoy, el Ministerio de Asuntos Exteriores de España recoge la existencia de casos de zika en las recomendaciones de viaje a Paraguay, pero no hace referencia a mujeres embarazadas ni otros colectivos de riesgo. Y no aparece ninguna mención respecto al viaje a otros países afectados.
Nosotros, en este caso y muy especialmente en el de mujeres embarazadas nos guiaríamos más por la recomendación de los CDC de EEUU de evitar totalmente el viaje en cualquier trimestre del embarazo. Respecto a las demás personas, en caso de viajar a esos países, deberían adoptar las precauciones básicas para evitar las picaduras de mosquito (principalmente, llevar manga larga y pantalones largos, usar repelentes de mosquitos y dormir protegidos por mosquiteras).
¿Pero hay que alarmarse o no?
La situación del virus del Zika no es como la del ébola durante 2014 y 2015, sus efectos en la salud no son tan graves y no debemos alarmarnos. Pero el hecho de que el virus se haya detectado en un ámbito geográfico nuevo y más amplio que el original, y el estado preliminar de las investigaciones (tanto sobre posibles vacunas como sobre su relación con el feto y con otras enfermedades más graves) nos hace ser cautos y por ello recomendamos evitar, en la medida de lo posible, los viajes a la zona o, como mínimo, tomar precauciones para evitar la picadura de mosquitos que podrían infectarnos, no sólo con Zika, sino con dengue, chikinguña u otras enfermedades.
Cuídate y déjanos cuidarte!!!